Intel espera trabajar con más de 100 ciudades alrededor del mundo para mejorar sus servicios públicos, usando para ello las últimas tecnologías inalámbricas.
Intel apunta a desarrollar el mercado de WiMax, tecnología que promete cubrir ciudades enteras con conexiones inalámbricas a Internet de alta velocidad.
Las autoridades de las ciudades serían de los principales usuarios de estas tecnologías, la próxima generación tras los sistemas Wi-Fi, que transmiten datos en distancias cortas.
Desde 2003, la compañía ha promocionado fuertemente el concepto, trabajando para compañías que construyen redes WiFi en cafés e incorporando la tecnología directamente en la mayoría de los procesadores de los ordenadores portátiles.
Las ciudades fuera de Estados Unidos que están trabajando en la iniciativa inalámbrica incluyen a Pekín y Jerusalén, Ambas tienen planes de probar WiMax en un año.